Élite Legal Extranjería es un nuevo servicio de asistencia jurídica en el que los profesionales de Élite Legal ofrecen soluciones inmediatas y respuestas.
Se resuelven todas las dudas e inquietudes legales, de forma práctica, moderna, rápida y económica; personalizado según sus necesidades y con la confianza de obtener los mejores resultados.
Debido a los tiempos que corren, a la pandemia, a la inseguridad social, a las inestabilidad laboral y los problemas burocráticos de la Administración Pública en general y, en especial, con los extranjeros, es nuestro deseo el mejorar la calidad y condiciones de vida que tienen todas las personas que están en nuestro país ofreciéndoles un servicio que hoy por hoy es tan necesario como imprescindible, un servicio jurídico que se encargue de todas las cuestiones jurídicas y dudas legales que pudieran tener en cuanto a trabajo, situación en España así como otras, de diferente índole, que les pudieran surgir.
Contrata o infórmate en el 900 37 70 88 o en www.elitelegal.es
Un informe de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) y la Comisión Europea muestra cómo la situación de los extranjeros se ha deteriorado en los últimos años de una forma que prácticamente no tiene parangón en Europa. Tanto en desempleo, tasa de pobreza o niveles educativos, los inmigrantes en España están entre los que peor parados salen.
Informes de la OCDE
El informe analiza por primera vez de forma global la integración de los inmigrantes y sus hijos. Y cuando se estudia sus niveles de pobreza en los 34 países miembros de la OCDE, solo los griegos salen peor parados. Un 40% de ellos viven en pobreza relativa (es decir, mantienen su hogar con menos de un 60% de la renta mediana). Este porcentaje dobla al de los nativos. Y la tasa de pobreza relativa entre los menores de 16 años supera el 50%, récord
que, una vez más, solo alcanzan los griegos.
Los datos desalentadores de pobreza están relacionados directamente con el derrumbamiento del mercado laboral que ha vivido España en los últimos años. Mientras que en 2007 los inmigrantes tenían más probabilidades de encontrar un puesto de trabajo que los nativos, la
crisis ha invertido esta situación. Las tasas de empleo de los extranjeros se redujeron entre más del doble de lo ocurrido entre los nacidos en España.
Este desplome ha sido especialmente grave entre los hombres, que ejercían mayoritariamente ocupaciones especialmente castigadas por la crisis, como la construcción. Las mayores dificultades de los inmigrantes en España se resumen en una cifra: mientras que la tasa media de empleo en la OCDE llega a los dos tercios, en España se queda ligeramente por encima del 50%.
Los inmigrantes son más sensibles al ciclo económico en todos los países, tanto para bien como para mal. Vemos por ejemplo cómo en Alemania la tasa de empleo ha aumentado más en este colectivo que entre la población en general. Y en España ha ocurrido lo contrario.
También observamos que ante la recuperación que ya estamos notando en España se pueden beneficiar más rápidamente.
La peor situación que vive este colectivo hace que los inmigrantes sean más proclives a adaptarse a nuevas ofertas de trabajo, y a aceptar empleos peor remunerados o que requieran un desplazamiento geográfico. Otro de los problemas que afecta a los trabajadores inmigrantes y a sus familias es el menor nivel educativo. Italia y España son los que registran peores tasas, con casi la mitad de los inmigrantes que solo tienen estudios primarios.
España también registra la segunda peor puntuación en cuanto a alfabetización de inmigrantes, con un 43% de la población nacida en el extranjero con un nivel de alfabetización básico.